Este día era especial, era la primera vez que amanecíamos fuera de España en Nochevieja. El día comenzó muy pronto, a las 8 de la mañana ya estábamos en pie y desayunando en el hotel con un par de cosas que habíamos bajado a comprar a la tienda. La idea era pasar la mañana visitando los únicos dos museos que estaban abiertos ese día: El Museo de Pérgamo y el Museo Nuevo.
Como la combinación de metro para llegar hasta allí no nos convencía mucho, decidimos ir andando hasta la Museumsinsel, la isla de los museos, lo que nos llevó una media hora. Por el camino volvimos a ver más tuberías de colores.
Como la combinación de metro para llegar hasta allí no nos convencía mucho, decidimos ir andando hasta la Museumsinsel, la isla de los museos, lo que nos llevó una media hora. Por el camino volvimos a ver más tuberías de colores.