País Vasco, la Rioja y Navarra día 5: Pamplona

by - 9:13

 Pamplona

Nuestro último día de visitas se lo dedicamos a la ciudad de Pamplona, la capital navarra mundialmente conocida por sus fiestas de San Fermín o los sanfermines. Dejamos el coche en un parking a la entrada del casco viejo y allá nos fuimos a explorar una ciudad que parecía bastante paseable y agradable.

De las primeras cosas que nos llamaron la atención fueron varias tiendecitas con un aire antiguo, donde se vendían verduras típicas como los espárragos, pero también pastas y otras víveres.
Sin título
Sin título
La verdad es que a mi me sorprendió el aspecto del casco viejo de Pamplona porque era bastante nuevo xD. Me esperaba casas de piedra tipo en Santiago, pero aquí las casitas eran de colorines, todas con su balconcito perfecto para ver los encierros. 
Sin título  
Tampoco sabía que tenía murallas, pero bueno, a eso llegaremos luego. De momento seguimos paseando por el centro hasta que llegamos al Ayuntamiento, desde el que se lanza el chupinazo que marca el inicio de las Fiestas de San Fermín cada 6 de julio a las 12:00 horas. No, no me he confundido, es el 6 de julio con el tradicional:

Pamploneses, pamplonesas, ¡Viva San Fermín! ¡Gora San Fermín!

 ¿Y la canción? Uno de enero, dos de febrero, tres de marzo, cuatro de abril, cinco de mayo, seis de junio, siete de junio ¡San Fermín!. Pues sí, el 7 de julio es San Fermín y tiene lugar el primer encierro, aunque por lo visto esta tampoco era la fecha original del santoral sino que era en octubre. Los pamploneses pidieron cambiarla para que el mal tiempo otoñal no empañara la celebración y desde entonces. La verdad es que nos impactó el pequeño tamaño de la plaza, acostumbrados a verla tan abarratoda por la tele, donde parece mayor. 
Sin título
Ayuntamiento de Pamplona
Hay que destacar también la cantidad de señales por todas partes, cosa que como turista -que no viajera, no seamos soberbios- siempre agradezco mucho. Si además son señales indicando bien la dirección como en Londres, ya me han ganado.
Sin título
Maravillosas señales pamplonesas

Catedral de Pamplona

Entramos en la Catedral de Santa María de la Asunción o Catedral de Pamplona, por la fachada oeste que es de un original estilo neoclásico. Acostumbrados a ver catedrales románicas y góticas, sin duda esta es un cambio. En realidad, la catedral tiene distintos estilos, ya que se fue construyendo en distintas épocas y esta fachada, del siglo XVIII, es la parte más moderna.
Catedral de Pamplona. Fuente: Wikipedia
El interior gótico es monumental. La nave central se levanta hasta los 28 metros de altura, tiene bonitas vidrieras y dos rosetones por el que se coloreaba la luz dándole un ambiente muy acogedor. En el centro de la nave está el Mausoleo a los Reyes de Navarra Carlos III "el Noble" y Leonor de Trastámara. Cuando entramos estaba acabando la misa, y la cantidad de gente que se agolpaba dentro nos impresionó. Olía a incienso y no sólo había muchos fieles, sino también muchísimos presbíteros. Por lo visto era una misa crismal así que había muchos enfermos que acudían para ser bendecidos con el santo óleo.
Interior de la catedral. Fuente: Wikipedia

Murallas


Desde la Catedral nos acercamos hasta la zona de las murallas, que como decía, me sorprendieron. No sólo es una muralla, si no una fortificación y hay también una ciudadela un poco más alejada. Nosotros accedimos al Mirador del Caballo Blanco. Es el punto más alto de las murallas y toma su nombre de un antiguo palacio que existía antes aquí. Desde aquí se pueden ver varios barrios extramuros y parte de las fortificaciones. Además es posible hacer un pequeño paseo por esta parte de las murallas a través del Paseo del Redín.
Sin título
Detalle de las murallas
Sin título
Vistas
Sin título
Detalle de la muralla

Palacio Real y Archivo General

Este corto paseo acaba en el Palacio Real mandado construir por Sancho IV en el siglo XII. El actual edificio acoge el Archivo Real y General y está diseñado por Rafael Moneo, arquitecto conocido por su reforma del Museo de Mérida o la ampliación del Museo del Prado, entre otros. El edificio actual aún conserva algunos elementos originales como algunos escudos, paredes o pilares. 
Sin título
Nos pareció un edificio fascinante y entramos a ver una pequeña exposición y una maqueta de madera de la ciudad. El patio interior era muy luminoso y servía de punto de encuentro entre la parte más nueva y la más antigua.
Sin título
Y justo enfente, la Iglesia de San Fermín de Aldapa o San Fermín de la Cuesta, donde se situaba una casa en la que parece ser habitó San Fermín después de ordenarse sacerdote. Antes existía aquí una capilla para dar servicio al Palacio Real.
Sin título 
Hicimos una parada para comer en un restaurante cercano (Restaurante Iruñazarra: mi crítica en Tripadvisor aquí) y posteriormente visitamos el Mercado de Santo Domingo, donde mi suegra se llevó de recuerdo unos magníficos espárragos naturales.

Sanfermines

La última parte de nuestra visita nos pareció divertido recorrer andando las calles del encierro. Comenzamos en los Corrales de Santo Domingo, donde se liberan los toros que han de recorrer después las calles del centro hasta llegar a la Plaza de Toros

Primer tramo: Cuesta de Santo Domingo. Esta cuesta se considera la más peligrosa, porque los toros salen frescos y no hay casi sitio donde refugiarse. Aquí encontramos carteles explicativos y la hornacina del santo desde donde se le canta para pedirle protección:
A San Fermín pedimos; por ser nuestro patrón; nos guíe en el encierro; dándonos su bendición
Sin título
Cuesta de Santo Domingos, lugar de inicio del encierro

Sin título
Hornacina de San Fermín (izquierda)
Segundo Tramo: Ayuntamiento. Aquí ya entramos de lleno en las calles del casco histórico, hay más espacio y vallas donde protegerse que permanecen fijas todo el año.
Sin título  
Último tramo: Calle Mercaderes y Estafeta. Este último tramo comienza con la curva de la Calle Mercaderes, muy peligrosa porque algunos toros pueden resbalar y llevarte por delante, y continúa por la estrecha y recta Calle de la Estafeta donde no hay más refugio que los propios portales. Cuando no hay encierro, esta es la calle de los pintxos.
 Sin título
Plaza de Toros: Y ya por fin se desemboca en la Plaza de Toros Monumental de Pamplona, que data de 1922 aunque hubo una ampliación en los años 60 diseñada también por Rafael Moneo. Esta plaza se llama "La Monumental" por su gran aforo, siendo la primera de España y la cuarta mundial. Vaya por delante que no nos gustan los toros, pero sin duda sentíamos curiosidad por entender algo más de esta tradición tan arraigada.

Plaza de Toros

La plaza de toros se puede visitar en visita guiada, que es bastante recomendable si se quiere tener una idea de lo que pasa aquí dentro. En la primera parte  de la visita se proyecta un vídeo del encierro que recorre las calles de Pamplona justo como acabábamos de hacer nosotros. Después, a través de una audioguía te va explicando lo que pasa en cada momento, las partes del coso, el tendido de sol y sombra, etc. 
Sin título
En el burladero
También hay una pequeña exposición de los mejores toros lidiados, las ganaderías, los toreros y demás parafernalia. Luego, se accede a los corrales donde se encierra a los toros los días previos a la corrida. 
Sin título
Corrales
También se visitan los vestuarios donde los toreros se ponen el traje de luces y  la capilla donde rezan por una buena corrida.
 Sin título Sin título
Finalmente, se llega al ruedo tal y como lo haría cualquier toro, por la puerta de toriles. Allí, en el coso, se puede jugar a ser torero o bien a ser un toro con una imitación sobre ruedas.
Sin título
En el exterior de la plaza hay varios monumentos, uno de ellos, a Ernest Hemingway, ya eternamente ligado a esta ciudad. Llegó como corresponsal a los 24 años y universalizó los sanfermines al inmortalizarlos en su primero novela exitosa The Sun also rises, traducida al español como "Fiesta".
Sin título
Monumento a Hemingway

Plaza del Castillo

Ya pensábamos que habíamos visto todo, pero entonces llegamos a la animadísima Plaza del Castillo, el corazón de la ciudad. Esta enorme plaza acoge cafés y hoteles centenarios
Sin título
Sin título
Café Iruña, primer establecimiento de la ciudad con electricidad
Ya de camino al coche nos encontramos con la bonita Iglesia de San Nicolás de Bari, situada en otra zona también muy animada de la ciudad.
Sin título
Iglesia de San Nicolás de Bari

Epílogo: Cuevas de Valdevimbre

Al día siguiente partíamos rumbo a casa, en un viaje en el que sólo paramos en Valdevimbre, donde tanto Mr. Knook como yo ya habíamos estado hace tiempo. Como necesitábamos para a comer en alguna parte y nos pilló por la zona, aprovechamos para enseñárselo a mis suegros. Valdevimbre es conocido por sus bodegas o cuevas excavadas en el barro. Hoy en día muchas se han reconvertido en restaurantes y uno de los platos típicos es la tortilla guisada. Aunque no nos había gustado mucho la vez anterior, volvimos a pedirla para que la probaran mis suegros. Y así acabamos este viaje por las tierras del norte (Cueva Miñambres: mi crítica en Tripadvisor aquí).
Sin título
Cuevas de Valdevimbre
Sin título
Interior de la cueva
Sin título
Tortilla guisada

Te puede interesar

0 comentarios